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La información aquí presentada es explicada en función de la perspectiva del autor en su entendimiento sobre los temas descritos. Este libro no pretende arreglar, diagnosticar y/o curar, por lo que el uso y aplicación del material de este libro es responsabilidad total del lector.

Ilustrado por Anais Vaillant.

BIOGRAFÍA

Desde pequeño recuerdo que tenía consciencia de un mundo distinto al físico, también poseía sensibilidad a ese mundo energético que llamamos espiritual. Dotes que me ayudaron a ver que mi propósito de vida tenía que ver con el despertar de consciencia de las personas, contribuyendo en brindarles una mejor calidad de vida con menor nivel de dolor y con mayor nivel de felicidad.

A través de los años, esto me llevó a un viaje de enseñanza y creación de cursos, sistemas y materiales de autoayuda para que las personas despertaran su consciencia y pudieran lograr sus propósitos en la vida con un mayor nivel de paz, disfrute y armonía.

Con la ayuda de maestros terrenales y la guía de maestros espirituales, logré obtener la claridad para avanzar en mi propia vida y obtuve mayor sabiduría de cómo seguir contribuyendo en la calidad de vida de los demás. Fue así como nace la Técnica de Aceptación que hoy utilizo y comparto con muchas personas en diferentes países para el despertar de su consciencia de amor, paz y felicidad.

Me apasiona lo que hago, y a través de las enseñanzas de Acceptance Technique sigo contribuyendo en el despertar de las personas y embarcándome en este viaje hacia un destino donde predomine la paz, el amor, el bienestar y la felicidad.

Ricardo Martínez

Creador de Acceptance Technique

INTRODUCCIÓN

En este libro el acto de aceptar significa aprender a reconocer de forma consciente y voluntaria cualquier situación que se nos presenta en la vida, sin oponer resistencia física, mental o emocional. Hay resistencia cuando no aceptamos algo, juicio, sufrimiento; en cambio, cuando aceptamos de manera natural, lo recibimos y aprobamos con tranquilidad en nuestro interior sin que ocasione conflicto alguno.

Es importante comprender que las situaciones presentes en la vida siempre son las correctas, ya que el universo, en conjunto con nuestro ser superior, selecciona y nos manda las situaciones apropiadas en cada momento para aprender nuestras lecciones terrenales-espirituales, y que así podamos seguir avanzando en nuestro crecimiento de consciencia. Sufrimos cuando nos resistimos a estas situaciones que buscan enseñarnos porque la resistencia produce una separación y desalineación con nuestro ser interior, y esto se experimenta con sensaciones incómodas de miedo. Cuando aprendemos a aceptar que estas situaciones, se nos presentan para nuestro bien; comenzamos a avanzar en nuestro despertar de consciencia con mayor armonía.

Por lo usual, la mayoría de nosotros vivimos en conflicto por la forma en la que hemos aprendido a operar en la vida, que es bajo supervivencia, competencia, juicio, resistencia y miedo, dejando a un lado la aceptación. Es por eso que enfrentamos muchas situaciones con conflicto, drama y sufrimiento, pues lo aprendimos desde nuestra infancia a través de padres, amigos, maestros y ejemplos de vida. En el subconsciente guardamos lo que hemos aprendido, que es operar en resistencia de forma automática con la ilusión de control y seguridad momentánea. Este mecanismo mental de resistencia nos genera mucho estrés, conflicto interior y drena nuestra energía.

El acto de resistir es lo que juzgamos, no aprobamos y rechazamos en nuestro interior de alguna manera, dificultando el flujo natural de una experiencia, situación o persona en nuestro paso. Este rechazo no permite la apertura a lo opuesto, la aceptación, y por lo tanto no permite que haya disposición, ni diálogo, ni entendimiento hacia nada más, porque en nuestra mente creemos que esa situación es incorrecta y no debe ser tal como se nos presenta. Esta resistencia es generada porque nuestras creencias mentales se oponen a este tipo de situaciones, y cuando esto sucede sentimos una forma de ataque a nuestra supervivencia. No hemos sido entrenados para tomar con calma un punto de vista diferente o situación que se opone a nuestras creencias.

La resistencia es creada como un mecanismo de sobrevivencia de la mente egótica para no dejar ir o cambiar lo que creemos como verdadero, ya que insinuaría que esas creencias están mal y tendrían que morir al ser remplazadas por unas nuevas. Cuando la resistencia aflora, experimentamos drama y un conflicto interno que genera sufrimiento, creando la ilusión de que el cambio no es bueno, y tratando de convencernos de quedarnos igual para que esa identidad o programación egótica siga con vida. Esta idea solo contribuye a defender aún más nuestra postura de no aceptación que mantiene y fortalece nuestro patrón de resistencia.

Esta resistencia se presenta en tres niveles: físico, mental-emocional y espiritual, y por lo general se expresa de forma automática como parte del mecanismo de la mente para seguir sobreviviendo, haciéndonos creer que el cambio dolerá más que lo que en realidad duele. La mente egótica sobrevive de una manera muy inteligente, trabajando desde la cortina subconsciente que la hace invisible e indetectable a nuestra consciencia; su objetivo principal es que permanezcamos vibrando igual, en una baja frecuencia energética de miedo y sufrimiento que corresponde a ese mismo nivel de programación mental. De esta forma es como permanecemos viviendo una misma realidad en donde se repiten situaciones dolorosas una y otra vez.

Cuando resistimos algo pequeño que no tiene mayor trascendencia, no nos causa tanto problema o sufrimiento, y lo vemos como un simple punto de vista diferente al nuestro. Sin embargo, cuando resistimos algo que es grande e importante para nosotros, generalmente se refleja con un sufrimiento emocional intenso en nuestro universo interno, que terminará por reflejarse y atraer en el universo externo situaciones dramáticas, conflictivas y caóticas.

Sufrimos siempre que resistimos algo en la vida, y cuando lo hacemos por mucho tiempo, termina causando daños internos y externos. Éstas van desde el estrés y conflicto en nuestras relaciones, hasta enfermedades graves en nuestro cuerpo que perjudican la calidad de vida. Todo esto altera nuestra realidad, aumentando el drama en nuestra vida diaria solo porque no hemos aprendido a aceptar la realidad como se nos presenta. Lo que en verdad resistimos es el cambio a las creencias mentales que tenemos, y cuando las situaciones de la vida se oponen a éstas, sufrimos tratando de mantener vivo lo que creemos verdadero para nosotros. Cuando atesoramos nuestras creencias y las defendemos como la única verdad, nos podemos llegar a sentir estancados y sufridos; si queremos avanzar pacíficamente en la vida, solo hay que aprender a aceptar y dejar ir nuestras creencias obsoletas.

Entendiendo que la mayoría de las personas actúan con miedo y resistencia en la vida como un modus operandi global, no nos sorprendamos que hoy en día existan relaciones de parejas con diversos problemas, empresas con trabajadores malhumorados, hijos rebeldes e incomprendidos, y personas por doquier mostrando altos niveles de ansiedad, dolor y agresión. Esto ha generado que vivamos una realidad de alto estrés y supervivencia, por lo que es muy importante aprender a vivir cuanto antes en lugar de solo sobrevivir en esta vida.

Hablar de aceptar, soltar, y hacer fluir apegos, ya no son temas nuevos; existen muchos guías y maestros hablando de ello. Cada vez hay más personas quienes comparten este tipo de información para poder brindar mayor claridad a la gente que está en busca de mayor paz y felicidad. Hemos llegado a una era donde las personas están buscando cambiar sus vidas cada vez más, y para esto hay que comprender primero el funcionamiento de nuestro universo interior. Así podemos desarrollar autoconsciencia y lograr una transformación profunda que en verdad se perciba en nuestro interior.

Ya es momento de dejar de memorizar información solo por saber más cosas; es momento de cambio y transformación. Esto es posible, y puede iniciarse desde cualquier situación imaginable. Existen diversas herramientas que pueden ayudar hoy mismo, solo si se está listo para ello.

En este libro compartiremos una técnica que ayudará a dejar de resistir y lograr dominar con facilidad El Arte de Aceptar. Esto conllevará a la liberación de creencias limitantes, sufrimientos y apegos para incrementar el despertar de consciencia. Enseñaremos la Técnica de Aceptación como una herramienta cuántica de introspección que logrará un verdadero cambio, y al liberar los sufrimientos aprendiendo el Arte de Aceptar.

La Técnica de Aceptación ofrece una manera fácil de lograr un cambio en nuestro universo interno con resultados de forma inmediata y permanente. Cualquier cambio que se quiera hacer en la vida es posible hoy. Una vez que el cambio interno se realiza, se disfrutará de una nueva realidad con mayor paz y felicidad. Cuando el universo interno es reconocido, aceptado, y se realizan cambios conscientes, el universo externo cambia por ley. A esto se le conoce como cambio cuántico, y se encontrar más información acerca de este tema en nuestro sitio web.

La Técnica de Aceptación es una poderosa herramienta cuántica que nos ayuda a eliminar nuestras resistencias a través de un proceso muy completo; además, apoya a liberar las creencias subconscientes de miedo en nuestra mente, disolviendo el sufrimiento y aumentando nuestros niveles de paz interior. Cuando el sufrimiento se elimina, nuestro nivel de consciencia aumenta, ayudándonos a percibir y sentir una experiencia de vida más placentera. Es una herramienta que ayuda a cualquier persona a conseguir rápidamente un mayor nivel de paz, amor, bienestar y felicidad.

Invito a conocer el cómo despertar tu consciencia a través del Arte de Aceptar, con la maravillosa Técnica de Aceptación. Esta técnica ayudará a explorar y a conocer tu universo interior que, una vez identificado, te hará descubrir a ti mismo; tu verdadero ser interior. Esto te brindará una oportunidad para convertirte en alguien que acepta cada experiencia de vida con mayor consciencia, apertura, paz.

“Lo que niegas te somete, lo que aceptas te transforma.”

~Carl Jung

Si requieres ayuda personal, agenda tu sesión con nuestros coaches certificados: 
www.acceptancetechnique.com

CAPÍTULO 1

UNIVERSO INTERNO

Al universo interno lo definimos como todo aquello que forma parte de nuestro interior. Toda la energía que se traduce en nuestros pensamientos, memorias, emociones, imágenes, sensaciones, creencias, conceptos, puntos de vista, ideas y toda aquella programación subconsciente que cargamos dentro de nosotros.

Estamos acostumbrados a la realidad en el universo externo debido a que la practicamos desde que nacemos, todos los días de nuestra vida. Como especie, llevamos miles de años practicando y comprendiendo como interactuar exteriormente en este mundo material. Se nos ha enseñado a hablar, ver, tocar, escuchar, sentir y percibir todo aquello que está en nuestro exterior y que conocemos como la vida en general. Debido a esto, hemos desarrollado un alto grado de certidumbre sobre el funcionamiento de este universo exterior. Sabemos que si oprimimos un interruptor, se enciende el foco, o si abrimos la llave del grifo, sale agua, o si depositamos dinero en el banco, aparece en nuestra cuenta bancaria. Todo como parte de un “causa y efecto”. Esta certidumbre nos brinda la anhelada ilusión de seguridad que buscamos en la vida, y fomenta el apego a seguir viviendo de esta misma forma.

Todo lo que hemos aprendido acerca de la vida exterior y de cómo operar en ella está muy bien explicado desde nuestra infancia en casa, y lo reforzamos con la escuela, los medios de comunicación masivos, libros y en todo tipo de conocimientos donde nos enseñan a lograr el éxito en ésta. Practicamos estos conceptos y formas de vida todos los días, haciéndolos comunes y reales para nosotros, hasta el punto de no cuestionarlas. Esta estructura de realidad exterior está bien definida y se nos presenta como la única oportunidad para salir adelante en la vida sin tomar en cuenta nuestro interior. Es como si se omitiera, negara o escondiera el conocimiento de nuestro universo interior para la participación exitosa en esta vida humana.

La realidad exterior nos muestra una estructura predefinida que establece cómo debemos iniciar nuestra infancia, siguiendo con los estudios escolares y graduaciones; luego nos incorporarnos a trabajos, a cómo ser adultos, el momento de casarnos, tener hijos y retirarnos, como si eso fuera todo en la vida. Es un sistema que nos enseña a vivir en este mundo bajo ciertas reglas, y que se supone debe seguirse al pie de la letra para poder tener una vida segura. Por lo general, aquellos que no siguen estas reglas para operar en esta realidad exterior son juzgados, criticados y rechazados por los círculos familiares, amistades y la sociedad en general. El miedo al juicio, rechazo, escrutinio, a la opresión y al cambio, nos “obliga” a seguir operando de esta misma forma, aunque queramos otro tipo de vida que nos brinde mayor libertad, paz y felicidad.

La respuesta para este importante cambio de vida se encuentra en nuestro interior; sin embargo, es poco lo que sabemos acerca de nuestro universo interno, al contrario del externo. El sistema de vida tradicional en el que crecimos no nos enseña sobre la operación de nuestro universo interior; no se nos habla de esto en nuestra casa, escuela o trabajo, y tampoco se promueve en los medios o en la sociedad el conocimiento de éste como una pieza clave para el éxito en la vida.

La mayoría hemos crecido en la inconsciencia e ignorancia del funcionamiento del universo interior y la importancia que este tiene en la creación de nuestra vida. Es como si estuviéramos caminando en una pierna para avanzar, y eso es parte del por qué muchos de nosotros nos sentimos incompletos e insatisfechos con el desarrollo de ésta. La consciencia del funcionamiento del universo interior nos brinda la pieza clave que complementa al conocimiento del universo exterior para poder crear una experiencia de vida más placentera, completa y de mejor calidad.

En estos tiempos, es solo una minoría aquellos que pueden identificar y reconocer conscientemente en su interior lo que sucede con sus emociones, reacciones, sensaciones, pensamientos y creencias cuando se enfrentan a las experiencias diarias de la vida. La mayor parte todavía van reaccionando confiados ante las situaciones diversas de vida que se les presentan, tal cual su programación inconsciente le indica. Como no hay consciencia sobre esta programación inconsciente en el interior, la aceptamos sin un cuestionamiento claro, aunque ésta pueda estar obsoleta y cause daño en la calidad de vida.

El conocimiento del universo interno nos otorga la claridad de poder identificar cómo es que nosotros estamos reaccionando, atrayendo y creando esta experiencia de vida desde una perspectiva íntima. A esto se le llama autoconsciencia, y es quien nos brinda la consciencia interna sobre la existencia de las creencias o programación de nuestra mente, y el impacto que tiene en la creación de nuestra vida. La identificación autoconsciente de esta programación en nuestro universo interno nos da la libertad para cambiar las creencias o conceptos negativos de nuestra mente, y así mejorar el buen vivir. La práctica de esta autoconsciencia también nos brinda la habilidad de poder reconocer la presencia de nuestro observador o ser interior.

A través de la autoconsciencia descubriremos la existencia de nuestra realidad interior que está compuesta por todas las memorias, pensamientos y experiencias visuales, auditivas y sensoriales que vivimos a diario en nuestro subconsciente. Primero se crea esta realidad interna, y luego la frecuencia energética de ésta atrae y manifiesta la realidad exterior en nuestro universo externo. Esta realidad interior es como vemos y experimentamos la vida desde adentro de nosotros, y es creada por todas las creencias conscientes y subconscientes, aprendidas y heredadas por nuestros ancestros. Son todos esos pensamientos y experiencias mentales que tenemos del presente, pasado y futuro que provocan todas esas reacciones de placer, dolor o neutralidad ante los eventos alrededor. Le hacemos frente a las situaciones que nos presentan en nuestra vida exterior de acuerdo a la realidad que sentimos en ese momento en nuestro universo interior. Si las situaciones que se nos presentan en el exterior son acordes al interior, experimentamos una sensación de placer, y viceversa. Si queremos cambiar la experiencia en nuestra realidad exterior, primero hay que cambiarla en nuestro interior.

Reconocer el universo interior, es hacer consciente nuestra realidad interna desde la existencia de nuestro observador o ser interior. Es percibir todas las experiencias interiores y exteriores desde esa consciencia observadora o ser interior. Es poder ver por adelantado la programación de la mente que nos limita y nos hace sufrir para liberarla antes de causar una experiencia de mayor daño o sufrimiento. Es poder comprender la experiencia de unidad total de ese ser interior que la mente no puede comprender, y así experimentar una vida con mayor armonía, paz y felicidad.

Cuando somos autoconscientes y dejamos que nos guíe el ser interior, es porque ya existe un reconocimiento de éste. Hay un entendimiento, identificación y consciencia de un cuerpo energético más allá del físico. Se reconoce como un ser energético o espiritual que observa y dirige nuestro cuerpo físico para vivir todo aquello que venimos a aprender y experimentar en este mundo. A este ser se le conoce como observador, testigo o “ser interior” y es ese que conecta el mundo energético espiritual con el material. Es aquel que observa nuestras experiencias interiores y exteriores, y le da la energía vital de vida a nuestro cuerpo físico para navegar en este viaje de aprendizaje para el alma.

Una vez que inicias el proceso de despertar de consciencia, y se explora el universo interno, sabrás que tu ser interior está ahí presente esperando con los brazos abiertos para hacer contacto. Él tratará de hacer presencia continua para guiar y apoyar en este viaje hacia una mayor consciencia. Buscará enseñar a acceder rápidamente a estados de mayor de consciencia y paz interior a través de la alineación y el fortalecimiento de la conexión interior. La práctica autoconsciente del Momento de Aceptación ayudará en gran medida a lograr dicha conexión con mayor rapidez.

Lo que bloquea nuestra conexión con este ser interior, es esa programación subconsciente de la mente que crea una realidad interior de soledad, miedo, incertidumbre, separación y supervivencia. Esta realidad interior se proyecta a nuestro exterior atrayendo personas, situaciones y experiencias de vida estresantes que enfocan nuestra total atención en las soluciones del universo externo, drenando nuestra energía y manteniéndonos atrapados en ese mismo nivel de consciencia energética. Es difícil percibir y reconocer esta realidad interior y la programación que la crea conscientemente cuando se desconoce la existencia del universo interior. Es importante aprender a reconocer la existencia del universo interno y la presencia del ser interior, ya que esto te ayudará a liberar la programación limitante y a despertar tu consciencia hacia una vida de mucho mayor potencial.

En este libro vamos a enseñar cómo es que la Técnica de Aceptación, que es el Arte de Aceptar, ayudará a liberar y soltar toda la programación mental negativa para despertar una vida ilimitada, libre y feliz. Hablaremos de cómo eliminar todo aquello que nos está bloqueando para ser más conscientes, y poder reconectarnos e integrarnos con nuestro interior. Reconoceremos conscientemente la existencia de nuestro universo o realidad interior como primer paso; esto nos ayudará a crear y experimentar un nuevo tipo de vida en un mayor estado de libertad, paz, amor, abundancia y felicidad.

TABLA DEL UNIVERSO INTERNO VS EXTERNO

El universo interno se compone de todo aquello que no se ve y que está en el interior de cada uno de nosotros, mientras que el universo externo se compone de todas las cosas visibles que conocemos en la vida. Por lo tanto, la realidad que se crea en el interior es a través de pensamientos, emociones y experiencias mentales, mientras que la del exterior se crea a través de personas, animales, plantas, situaciones, y objetos.

El ser interior es el observador o el ser energético quien experimenta esta realidad de consciencia, y es a través de la auto consciencia que puede observar internamente lo que no es visible al ojo humano; mientras que el cuerpo físico como materia en esta dimensión de consciencia es quien a través de la consciencia misma observa, escucha, percibe y siente su realidad exterior.

En el universo interno se puede alcanzar un despertar espiritual cuando se logra la verdadera libertad interior, mientras que en el universo externo se busca la seguridad para poder lograr el éxito, reconocimiento y cosas materiales.

“Cada experiencia que se nos presenta nos da la oportunidad para conocer nuestro interior.”

~ Ricardo Martínez

Para poder entender tu universo interior observa tus emociones, 
son tu sistema de alarma que indica cuando hay algo que cambiar en nuestro interior.

CAPÍTULO 2

UNIVERSO EXTERNO

El universo externo es todo aquello que forma parte de nuestra realidad exterior. Son todas aquellas experiencias físicas y materiales que se componen de las actividades, eventos, situaciones, cosas y personas que abarcan el total de nuestra vida exterior.

Este universo nos brinda un campo de acción material variado y completo de experiencias que nos ayudan en nuestro crecimiento. En este campo humano material pasamos por experiencias físicas, mentales, emocionales y energéticas que ofrecen intensas actividades sensoriales. La riqueza sensorial de estas experiencias humanas nos brinda grandes aprendizajes en muchos niveles. Esta es la razón por la que nuestro ser energético interior se encarna en un cuerpo físico dentro de este universo; viene a vivir en carne propia estas ricas y completas experiencias externas que le ayudan en su desarrollo.

Este universo le brinda a nuestro ser energético interior el escenario material ideal para su crecimiento de consciencia. Las variadas experiencias humanas están diseñadas para ayudar a nuestro ser interior a evolucionar más rápido de lo que puede lograr solo en su forma natural de alma o cuerpo energético. Es una escuela virtual o salón de clases que ayuda y empuja a nuestro ser interior a cursar las experiencias necesarias para el aprendizaje de sus lecciones espirituales de consciencia. El aprendizaje y la práctica continua de estas lecciones a través de las experiencias humanas diarias, ayudan a nuestro ser a lograr alcanzar mayores estados conscientes de libertad, amor, paz y felicidad. Este crecimiento le ayuda a nuestro ser interior a progresar hacia dimensiones superiores de consciencia que le ofrecen aun un mayor desarrollo y crecimiento.

Los diversos tipos de experiencias negativas, neutrales y positivas que vivimos en el universo externo son creadas y experimentadas primero en el interior. Es a través de nuestra programación mental, que creamos esta realidad interior de cómo será la vida en el universo exterior. Esta realidad interna está formada por las situaciones conscientes e inconscientes que se presentan en nuestro interior en forma de pensamientos, memorias, imágenes y sensaciones. Todas estas situaciones internas producen emociones y sensaciones que nos hace creer con más fuerza en la realidad y veracidad de éstas.

Una vez que estas experiencias están formadas en nuestra realidad interior, pasan a ser proyectadas al universo exterior a través de nuestra percepción. Es decir, la experiencia de esa situación en nuestra realidad interior nos da el marco de referencia de cómo vivir y enfrentar esa situación en el exterior cuando se nos presenta. Si la situación externa se contrapone a la naturaleza de esa experiencia en nuestra realidad interna, la experimentamos de forma negativa con dolor y sufrimiento. En cambio, si la situación que se nos presenta es similar o igual a la de nuestro interior, la experimentamos de forma positiva, con placer y brazos abiertos. La intensidad de la sensación de placer o dolor que vivimos en ese momento es proporcional al peso o importancia que tiene como lección en nuestra etapa de vida actual.

La programación mental que crea esa realidad interior nos hace creer lo que es “bueno o malo” y cómo es que debe de ser la vida en este universo externo. Así es que cuando se nos presenta algo diferente o contrario a esta realidad interna, se detona en nosotros una sensación incómoda de resistencia. Esta sensación de resistencia activa nuestros miedos, pensamientos de supervivencia y nos lleva a emitir juicios ante la persona o situación que se nos presenta. Estos pensamientos son proyectados hacia el exterior creando una experiencia de vida dramática, negativa y dolorosa.

La mayoría todavía no somos conscientes de que la mente proyecta la realidad interna positiva o negativa sobre las personas y situaciones que se nos presentan en la vida. Esto nos hace creer como si las personas o situaciones de vida nos atacarán de alguna forma, sin darnos cuenta que son nuestras propias proyecciones. Entre más dormida está nuestra consciencia, tendemos a proyectar mayor negatividad sobre la vida exterior y viceversa.^[1]

Para comenzar a identificar la existencia de esta realidad interior y sus proyecciones, requerimos desarrollar la habilidad de la autoconsciencia. Es a través de ésta que podemos comenzar a diferenciar proyecciones negativas que vienen desde la programación mental de nuestro ego y aquellas positivas que vienen de la conexión energética con nuestro ser interior.

ESQUEMA BÁSICO DE PERCEPCIÓN

“Para cambiar el universo externo, es necesario primero cambiar el universo interno”.

~Ricardo Martínez

Todo lo que observas en el universo exterior es el reflejo de tu universo interno. 
Lo que hay adentro, hay afuera.

FIN DE VISTA PREVIA

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